Delincuentes de parque

T: ¡Hola Sam!! ¡Quita de mi casita que voy a esconderme! ¡Pero ya!
S: Hola Thor, ¿Qué pasa con tantas prisas? ¿Y esos nervios?
T: Es que me tengo que esconder, ¡rápido, déjame sitio!
S: Pasa, pasa… ¿pero de que te escondes? ¿Por qué?
T: Me escondo porque soy un delincuente, hago cosas ilegales y me vigilan.
S: Tú estás mal de la cabeza, tío, ¿te has escuchado? ¡Que eres un perro!
T: Sam, traigo novedades, en el parque ahora tenemos policías.
S: Eso está bien ¿no? Tienes que conocer a distintos tipos de perros, unos son de asistencia, otros de compañía, otros hacen agility, otros ayudan a la policía… ¿Qué pasa que esos no pueden tener tiempo libre para jugar y charlar?
T: No, no me has entendido ¡que tenemos policía secreta humana para vigilarnos!
S: ¿Qué dices? Eso no puede ser ¿Cómo os va a vigilar a vosotros la policía humana? ¿Qué hacéis en el parque?
T: Olisqueamos, jugamos, paseamos… es nuestro pequeño respiro en la ciudad.
S: Algo habréis hecho ¿un atraco? ¿Un robo? ¿Trafico de cacas? ¿Contrabando de juguetes? ¿Robo de piñas? ¿Partir el parque en dos para meter un trolebús “ecológico” en el medio?
T: Te equivocas, no atracamos: ponemos cara de buenos para que las personas que van con otros perros nos den chuches, las cacas nos las recogen los compis humanos y las tiran a la papelera, los juguetes solo nos los prestamos, lo de las piñas… algunas van para casa, y lo de partir el parque en dos es cosa del ayuntamiento ¡nosotros estamos en contra!
S: Y para que os vigilan ¿para que no os perdáis? ¿para saber que estáis bien cuidados? ¿para que no salgáis de la zona destinada para perros?
T: No hay zona para perros Sam
S: Pero, yo he leído que existen
T: Aquí lo único que existe es el afán recaudatorio, les es más rentable pasear por el parque para multar a las personas que llevan un perro suelto que vigilar otras cosas… que dicho sea de paso pueden suceder en el mismo parque
S: Claro, ganan dinero con un mínimo esfuerzo, ¡yo también quiero! ¡me voy a ir al parque a multaros! ¡dinerito fácil y rápido!
T: No es gracioso Sam, no te rías.
S: Perdona Thor, pero esto que me dices es tan ridículo, se ve de lejos que me estas tomando el pelo, pero vamos a ver ¿no tiene nada mejor que hacer la policía que perder el tiempo con vosotros? ¡que no te creo!!
T: Es verdad, lo que te digo es verdad, tenemos muchas cosas prohibidas y prohibiciones para perros.
S: ¿Zonas prohibidas? ¿Prohibiciones?
T: No nos dejan ir a la playa, no nos dejan ir sueltos, no nos dejan entrar en la mayoría de los sitios, hay muchos carteles de prohibidos perros… nos lo ponen muy difícil, mucho.
S: ¡Ya será menos!
T: Al contrario, en algunas ciudades es incluso peor, pregunta y verás
S: Luego les preguntaré, pero primero a ti, he visto fotos tuyas en las playa, suelto en el parque, se que vas a muchos sitios de humanos… ¿Cómo lo haces?
T: Respuesta fácil pequeño Sam: los amitos y yo somos unos delincuentes.
S: Vale, ya pillo tu miedo, ahora que lo conozco me gustaría preguntar a otros perros ¿Cómo sobrevivís en vuestra ciudad? ¿la ley os ilegaliza?

Samithor